Red Bull, la bebida energizante es un ejemplo cuya publicidad es muy rica visualmente, ya que los colores brillantes del empaque de dicha bebida sumado a la botella de este producto en escala es otro atractivo que hace que la publicidad funcione. Así pues, estamos en la era en donde existe una sobrecarga de información, de un bombardeo de marcas, de spots publicitarios, etc. a nuestro alrededor, qué mejor idea de los anunciantes que utilizar los medios de transporte, el cual posee mucha más oportunidad de llegar a varios puntos del país con la ventaja de su libre circulación.
Estas dos imágenes son otros ejemplos en los que la publicidad juega con el ojo humano. La posición de esta botella da la sensación al público que abarca el ancho de este transporte de carga. La cuestión es solo colocarse en un ángulo en donde se pueda observar tanto el lado posterior como uno de los lados paralelos para poder con ello, conseguir este efecto visual, tal y como se observa en la imagen presentada. 
A su vez, se puede observar la publicidad de alimentos para perros "Tiernitos", el cual es tan irresistible para ellos que corren detrás de este producto, haciendo que su dueño se estrelle en la parte posterior de un bus. De esta manera, últimamente, los anunciantes están utilizando a muñecos que parecen personas de verdad, dándole más realismo, un efecto de relieve, entre otros elemtos, que hacen que el anuncio no se vea tan plano, homogéneo, sin gracia alguna, etc.
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